Escultura sutil con transparencias y reflejos que sujetan las piezas esenciales de una mecedora.
Escultura en madera tubo de `plástico y metacrilato
Escultura sutil con transparencias y reflejos que sujetan las piezas esenciales de una mecedora.
Escultura en madera tubo de `plástico y metacrilato
Infraleve hace referencia a los inframince de Marcel Duchamps
Soportar la presión de los extremos, la vaguedad de los términos excesivamente
utilizados, provoca incomunicación. Solo las colillas esparcidas por el suelo del
taller y las mondas de naranja en el cenicero pueden relajar un momento tenso.
La ansiedad hace carambola con los puntos blancos aplastados y descansa, al final
relajada, en los poros de esa piel cítrica de color saturado.
Al cerrar los ojos se abre la consciencia y el pensamiento deambula tocando las
cimas del mejor recuerdo. La memoria despliega una cartografía extraña por
inconexa, pero necesaria: todo se confunde. Y el taller, abierto de par en par, se
ilumina teñido de azul-verde.
La posibilidad a ritmo lento, pausado, reencuentra su imagen y las aristas, los
perímetros y extrarradios definen el objeto que es todos los objetos: la idea que
se transforma constantemente adaptando su figura al medio. Y es que la
impotencia, siempre tan patente, fabrica el olvido, la amnesia de un mundo de
opuestos-extremos- empeñados en tensar la vida y esparcir sus añicos.
Esta serie la realicé antes de conocer la obra de Richard Tuttle. Ese año
(Rachway, Nueva Jersey, 1941) Artista estadounidense. Inició sus trabajos dentro del arte conceptual. Sus obras son objetos-esculturas con influencias del arte primitivo. Ha participado en las Documenta V (1972), VI (1977) y VII (1982) de Kassel.
Del susurro
convertido en secreto
apagado por el molesto clik¡
on-off, on-off, on-off…
desconectar sin comentarios y
convertir el ultimo clik¡
en silencio.
Salir a la calle y trocear el mundo
en pequeñas porciones.
Cortar el hilo, abrir la caja y
comer las migajas de pan
abandonadas.
Perderse en la montaña
De folios arrugados
Blancos de miedo,
Con las vidas en negrilla
Olvidadas.
Hacer de las ventanas
Agujeros negros.
Saltar al vacío, suspenderse
entre el cero y el uno
entre la aguja y el hilo
entre la fecha y el tiempo
mecerse.
«Cinco mil soles de oro» es una pieza que apareció de un comentario de un amigo que trabajaba en Lladró y me comentó que hay un pasillo subterráneo en la fábrica que tiene los techos muy bajos y tienes que pasar con la cabeza acachada para no darte con el techo. Bién , pues en esta postura hay o había, un hombre mayor trabajando cerrando paquetes todo el día. Las tres piezas son moldes que utiliza lladró para reproducir sus figuras relamidas y dulzonas. En el interior de estos moldes, he grabado un billete de cinco mil soles de oro en el que se representa un minero picando en la mina.